Desde la cálidas tierras malagueñas, Ade siempre soñó con subirse a una moto y recorrer carreteras. Hoy nos comparte un poco más de su historia.
'Desde niña, y teniendo a dos hermanos varones mayores que yo a los que les encantaba el deporte, y a mí que me gustaba imitarlos, andaba jugando entre muñecas… pero también con patines de hockey, monopatines, bicicletas,...y cómo no, en el momento que vi la primera moto en casa, ya soñaba con conducirla (una Honda Italia color plata reluciente) Pero mi padre, que sufrió un grave accidente de moto en su juventud, no quería que tuviésemos moto ninguno, y menos yo, por lo que en mi adolescencia se me iban los ojos detrás de todos los Vepinos y Vespas 75 Primavera que veía.

¿Qué te da la moto?
La moto me da diversión, independencia, aprendes a gestionar emociones y superar obstáculos, te hace más fuerte mentalmente pues cada vez que sales a la carretera comienza un nuevo entrenamiento de poner en marcha todos los sentidos y esa sensación de la que tanto se habla...la libertad que sientes. Eres sólo tú y tu máquina.
Cruzar Marruecos en moto ha sido una bonita experiencia, a veces aquello es de locos pero te engancha. El palmeral de Zagora, Imichil, el bosque de Cedros, son las zonas que más me gustan
¿Por qué una GS?
Con 20 años había por casa una Honda Dominator 650 y para mí, la reina de todas las motos: una Bmw K75. Las dos motos que más me gustaban, así que sólo había que mezclar los dos conceptos: Bmw y trail = GS
¿Cuáles son las ventajas y desventajas de ser una mujer conduciendo una GS?

¿Cuál es tu próximo objetivo?
Realizar un curso de conducción para mejorar el nivel en carretera y algún proyecto de viaje más adelante que aún no esta definido. Por lo pronto, disfrutar de mi tierra y esperando la próxima reunión de GSGirls!
'Lo mejor y que no me imaginaba es que gracias a conducir una GS iba a encontrar a un grupo de moteras tan increíble como es el de las GSGirls Península Ibérica.'